Misión de Nuestra Señora de Porciúncula -- Itinerario de viaje de las Misiones Coloniales Españolas del Suroeste

Vista de la iglesia de la misión. Foto: Roger Clark.

Misión de Nuestra Señora de Porciúncula
Pecos Pueblo, Parque Histórico Nacional de Pecos, Nuevo México

Coordenadas: 31.567472,-111.051842
#TravelSpanishMissions
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Itinerario de viaje de las Misiones Coloniales Españolas del Suroeste

Mission Nuestra Señora de Porciúncula
Sur del pueblo, mirando hacia la misión.

Foto: Patricia Lenihan.

Entre las Montañas de Sangre de Cristo y la Mesa Glorieta, se abre el Paso Glorieta, una zona atravesada y habitada por muchos pueblos durante miles de años. Entre las montañas y las llanuras, el Paso Glorieta es un lugar donde han tenido lugar historias de conflicto y comercio, ascenso y caída de los poderosos indios Pecos, llegada de los españoles, creación del Camino de Santa Fe y la Guerra Civil. Hoy en día, el Parque Histórico Nacional de Pecos es un Parque y Monumento Histórico Nacional que conserva más de 12.000 años de historia, incluyendo el antiguo Pueblo Pecos, una misión colonial española, lugares del Camino de Santa Fe, el Rancho Forked Lightning, y el campo de la batalla de Paso Glorieta de la Guerra Civil.
Próspero Centro Agrícola y Comercial

Durante muchos años los habitantes de Pecos disfrutaron de la ubicación estratégica del Paso Glorieta como puerta de entrada a las llanuras, y el pueblo fue un centro de comercio donde se intercambiaban maíz, algodón, cerámica y otras mercancías Pueblo por productos de búfalo, puntas de sílex por herramientas de corte, y esclavos. También era un lugar peligroso, donde los beneficios del comercio estaban siempre contrarrestados por el riesgo de ataques. Para proteger a la población de 2.000 personas de los invasores, los pecos crearon una comunidad fortificada con una gran muralla que, de acuerdo con uno de los visitantes españoles, era visible a gran distancia. Pecos llegó a tener más de 500 guerreros que los españoles valoraron como aliados.

Los indios Pecos hablaban Towa, lengua que todavía hoy se utiliza en Pueblo Jemez, y formaban parte de los interconectados grupos Pueblo en lo que se convirtió en el suroeste de Estados Unidos. Al igual que sus antepasados, los pecos eran agricultores que basaban su dieta en maíz, frijoles y calabazas, variedades seleccionadas a través del tiempo por su idoneidad para un clima seco y fresco. La agricultura también influyó en el diseño arquitectónico del pueblo de Pecos. Al igual que muchas tribus Pueblo del suroeste de Estados Unidos, los pecos construyeron almacenes para reservar comida para el invierno y presas para regular el agua que regaba sus cultivos. Su impresionante arquitectura también incluye salas ceremoniales subterráneas conocidas como kivas y grandes casas de varios pisos que albergaban a familias numerosas. Estos edificios fueron construidos sobre los almacenes utilizando piedra local y adobe –material de barro y paja que mezclaban y moldeaban.
Mission Nuestra Señora de Porciúncula
7 de agosto de 2011: gente del pueblo de Pecos lleva una réplica de "Nuestra Señora de los Ángeles", pintura del siglo XVIII, a la misa anual celebrada en las ruinas. La obra original fue confiada a la aldea cuando se abandonaron el pueblo y la iglesia.

Foto del Parque: Heather Young.

Llegada de los españoles

El pueblo de Pecos se encontró por primera vez con exploradores españoles cuando Francisco Vásquez de Coronado viajó hasta el norte de México en busca de las siete ciudades de oro de Cíbola. La expedición de Coronado no encontró ciudades de oro, sino las comunidades Pueblo agrícolas. Los pueblos resultaron atractivas fuentes de suministros y mano de obra para los españoles y se convirtieron en el objetivo de la colonización posterior. La presencia española a largo plazo se inició en 1598, cuando el proyecto colonizador de Don Juan de Oñate llevó a los frailes franciscanos a la zona. Los sacerdotes llegaron al pueblo para convertir a la gente de Pecos y guiar la construcción de la Misión de Nuestra Señora de Porciúncula. Los misioneros españoles tuvieron poco éxito al principio, y el pueblo los mantuvo a raya en los confines de la comunidad. Cuando el veterano misionero Fray Andrés Juárez llegó a Pecos en 1621, la relación entre los indígenas y los misioneros mejoró. Bajo la dirección de Juárez, los pecos y los frailes franciscanos construyeron una iglesia a 800 pies de distancia del pueblo principal. En ese momento, fue la más prominente de todas las iglesias de misiones de Nuevo México, con muros de 8-10 pies de grosor y seis torres, construida con unos 300.000 ladrillos de adobe.
El sacerdocio de Fray Juárez potenció la misión Pecos, que fue parte de la gran expansión franciscana de 1621 a 1634 por todo Nuevo México. Los conflictos entre la Iglesia y las autoridades civiles sobre el trabajo y la lealtad de los pueblos nativos minaron las misiones. Los españoles intentaron suprimir las prácticas religiosas nativas, que se consideraban en conflicto con el catolicismo, y esta política, entre otros factores, fomentó el resentimiento que finalmente llevó a la Rebelión Pueblo de 1680.
Mission Nuestra Señora de Porciúncula
Vista de la iglesia de la misión.

Foto: Roger Clark.

Tras décadas de presencia española, numerosos grupos de indios Pueblo se unieron para expulsar a los españoles de sus tierras en la Rebelión Pueblo de 1680. Mientras algunos indios Pecos eran todavía leales a los franciscanos, muchos siguieron a sus patriarcas tribales en la revuelta contra los esfuerzos colonizadores españoles y mataron a los sacerdotes. La enorme misión que simbolizaba el dominio español fue incendiada y se derribaron sus muros. Los españoles y sus aliados indígenas se retiraron a México.

Doce años más tarde, en 1692, Diego de Vargas volvió a visitar Pecos y sus habitantes le recibieron proporcionándole 140 guerreros para ayudarle en su esfuerzo por restablecer el dominio español en Nuevo México. Guerreros pecos y soldados españoles reconquistaron Santa Fe y los españoles se restablecieron en la región. Pecos y españoles erigieron una pequeña pero importante iglesia sobre las ruinas de la antigua misión, y juntos establecieron una comunidad pacífica Pueblo-Española en Santa Fe, que se mantuvo hasta la década de 1780. En las décadas siguientes, la emigración, enfermedades, incursiones en el pueblo y divisiones internas entre los leales a los españoles y los que mantenían las prácticas tradicionales, redujeron la población a menos de 300. La función de Pecos como centro de comercio se desvaneció cuando los colonizadores españoles, protegidos de los comanches a través de tratados, establecieron nuevas ciudades al este. Éstas se convirtieron en los nuevos centros de comercio. Pecos y la misión parecían casi fantasmales cuando el comercio del Camino de Santa Fe comenzó a fluir en 1821. En 1838, los pecos que quedaban se unieron a sus parientes Towa a 80 millas al oeste en Pueblo Jemez, donde sus descendientes aún viven hoy en día, preservando las características tradiciones Pecos.
Alfred V. Kidder
Una figura fundamental en la arqueología americana, Alfred V. Kidder forjó su nombre en las ruinas y misión de Pecos Pueblo.

Foto del NPS del Museo y Centro de Visitantes de Pecos NHP.

Lo que se ve hoy en día

La ubicación estratégica de Pueblo Pecos junto al Paso Glorieta significó que incluso después de abandonado, permaneciera siendo una parte importante del paisaje. Las ruinas del enorme complejo se convirtieron en un monumento importante del Camino de Santa Fe y más tarde del ferrocarril. El complejo fue una parada para los viajeros y un objetivo para los vándalos del siglo XIX. En el siglo XX el arqueólogo Alfred V. Kidder, comenzando en 1915, excavó el lugar durante más de una década. Sus estudios se convirtieron en una obra fundacional de la arqueología del suroeste. Más tarde, durante la Gran Depresión, el Cuerpo Civil de Conservación y la Administración Nacional de la Juventud limpiaron los escombros y trataron de estabilizar las paredes de la iglesia, que aún medían más de 30 pies de altura. El pueblo fue declarado Monumento Histórico Nacional en 1960 y Monumento Nacional en 1965.

El Parque Histórico Nacional de Pecos está administrado por el Servicio de Parques Nacionales que ayuda a preservar la rica cultura e historia Pecos. Los visitantes del parque pueden entrar en dos kivas, los espacios ceremoniales y sociales en los que los pecos creían se les permitía acercarse a los espíritus del inframundo. Las kivas continuaron siendo una parte importante de la vida de Pecos, incluso después de que los frailes franciscanos españoles establecieran su primera iglesia a principios del siglo XVII. Una de las atracciones del parque son las visitas guiadas a la estructura original de la iglesia perdida, la que fue destruida en la revuelta. Los turistas también pueden visitar las ruinas del Pueblo Pecos, otra iglesia de la misión y las dos kivas reconstruidas, siguiendo el sendero autoguiado.

Planifique su visita

El Parque Histórico Nacional de Pecos, una unidad del Sistema de Parques Nacionales y Monumento Histórico Nacional (National Historic Landmark), (NHL texto y fotos) está situado junto a la Interestatal 25, a 25 millas al este de Santa Fe, Nuevo México. Haga clic para el archivo del Registro Nacional de Lugares Históricos: texto (text) y fotos (photos.). El Centro de Visitantes y Sendero del Parque Histórico Nacional de Pecos están abiertos diariamente de 8:00 am a 6:00 pm durante el verano. El horario de invierno del sendero es de 8:00 am a 5:00 pm, y el centro de visitantes cierra a las 4:30 pm. El parque está cerrado en Acción de Gracias, Navidad y Año Nuevo. Hay una cuota de admisión. Para obtener más información, visite la web de Pecos National Historical Park del NPS o llame al 505-757-7200.
El Parque Histórico Nacional de Pecos ha sido documentado por el Registro de Edificios Históricos del Servicio de Parques Nacionales (Historic American Buildings Survey.). El Parque Histórico Nacional de Pecos también se ofrece en los itinerario del Servicio de Parques Nacionales de: American Southwest Travel Itinerary, de Places Reflecting America’s Diverse Cultures: Explore their Stories in the National Park System Travel Itinerary, y del American Latino Heritage Travel Itinerary
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Last updated: April 15, 2016

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